Este 18 de mayo, el Gobierno Español ha dado su visto bueno a la Ley de Residuos y Suelos Contaminados, la cual implantará dos nuevos impuestos verdes relacionados con los envases plásticos de un solo uso y con los residuos en vertederos e incineración. Su objetivo es reducir un 15 % los desechos antes del 2030 en relación a los del 2010 y reducir hasta un 70 % los recipientes de plástico de un solo uso antes del año 2030.

Los puntos claves:

  • Nuevos impuestos.  0’45 euros por cada kg de envase de plástico no reutilizable; y entre 1’5 euros y 40 euros por cada tonelada métrica de materiales que se depositan en el vertedero o en la incineración.
  • Queda prohibida la distribución gratuita de estos materiales plásticos, debiéndose cobrar un precio por cada uno de los productos de plástico que se venda al consumidor y diferenciando este precio en el ticket de venta.
  • Adiós a los plásticos de un solo uso. La ley también ha introducido la sustitución de artículos monodosis, anillas de plásticos y palitos de plástico por otros materiales, además de prohibir rotundamente las pajitas de plástico, bastoncillos, cubiertos, platos y cualquier otro bien de plástico oxodegradable y microesferas plásticas de menos de 5 milímetros.
  • Menos plásticos en recipientes. Apartir de ahora todas las tapas y tapones de los recipientes, deberán permanecer pegados a ellos, y todas las botellas PET deberán contener como mínimo un 25 % de plástico reciclado en su composición a partir del año 2025, y un 30 % para las botellas de bebidas a partir del año 2030.
  • Respecto a la incineración y depósito de vertederos, se contempla reducir a la mitad los alimentos desechados en el hogar, en hoteles, restaurantes y cafeterías; rebajar un 20% las pérdidas de alimentos en las cadenas de producción y prohibir destruir excedentes no vendidos de textiles, juguetes o aparatos eléctricos y la suelta intencionada de globos.
  • Además de ampliar la recogida separada de biorresiduos domésticos a partir del 2022 para entidades locales con más de 5.000 habitantes, y, a partir del 2024, al resto de municipios. Luego, los residuos textiles, aceites de cocina usados, residuos domésticos peligrosos y residuos voluminosos, a partir del año 2025.
  • Más agua del grifo. La norma establece la obligatoriedad de que la hostelería ofrezca a sus clientes la posibilidad de beber agua del grifo en lugar de agua embotellada. Excepto en centros sanitarios, donde se seguirán permitiendo los envases de un solo uso.

La nueva normativa reemplaza la Ley vigente que hay hasta ahora desde el año 2011, se considera clave para incentivar la economía circular y prevé recaudar con las dos tasas 1.378 millones de euros anuales.

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